Hace tiempo que tomé la decisión
de compartir mis recetas en la red, pero la organización de una mudanza a Suiza
retrasó la puesta en marcha del blog.
Como Basel es la ciudad que nos ha acogido a mi familia y a mí, la
receta de hoy será un plato muy famoso por estos lares: el rösti.
¿Y qué es el “rösti”? Pues es un plato originario de
la zona suiza de habla alemana que se
hace con patata rallada, y que se fríe como si se estuviera haciendo una
tortilla de patata. Fuera de Suiza se le llama “torta de patata”.
En Basel le añaden diferentes
ingredientes: panceta, bacon, queso fundido, hígado de ternera, cebolla… Y está
buenísimo.
Yo, para darle un toque
diferente, le he puesto queso de untar y salmón ahumado. Y las patatas que he utilizado
son unas que no son harinosas, aquí las llaman “festkochend”, algo así como
“firmes en la cocción”. Pero con las harinosas también queda muy bien.
La idea la he sacado del libro “Cocina de todo el mundo: 1000 recetas que combinan tradición y modernidad” que los
Reyes Magos me trajeron hace casi una década. He cambiado la mantequilla por
aceite de oliva virgen extra y la crème fraîche por queso de untar.
Para 3 raciones se necesita:
6 patatas medianas, aceite de
oliva virgen extra (AOVE), sal, una tarrina de queso de untar, 200 g. de salmón
ahumado y eneldo.
Cómo prepararlo:
Pelar y lavar las patatas, secándolas con un trapo de
cocina limpio.
Rallarlas encima de una ensaladera, con un tamaño de rallador como
el de la foto.
Para freírlas he utilizado unas sartenes especiales para hacer tortilla
de patata que me traje de España. Lo que tienen de especial es que son más
cómodas porque permiten voltear la tortilla o el rösti sin necesidad de
utilizar un plato. Una tiene un fondo normal, y la otra tiene un fondo para
cocinar a la plancha.
Cubrir con AOVE el fondo de la
sartén que no es para cocinar a la plancha, y cuando está caliente (comprobarlo
echando un poquito de patata) echar la patata rallada poco a poco, cubriendo bien
el fondo de la sartén. Aplastar con una espumadera, y echar sal. Dejar que se
haga a fuego medio. Si el fuego está muy alto se corre el riesgo de que la
parte de abajo se queme, mientras que la intermedia quedará cruda, y el rösti perderá su gracia.
Mientras la patata se hace (5-7
minutos aproximadamente), aprovechar para echar un poco de aceite en la otra
sartén, y calentarlo. De este modo, cuando la torta esté hecha por un
lado, sólo se tendrá que enganchar esta
segunda sartén sobre la primera, coger los dos mangos y girar las sartenes. A
continuación retirar la sartén que ya hemos utilizado y poner la segunda sartén
en el fuego para que se haga la torta por el lado crudo.
Si se utiliza una sola sartén, cuando
la torta esté hecha por un lado, poner un plato llano más grande que la sartén encima
de ésta y voltear. Calentar aceite en la sartén otra vez, y echar la torta con
el lado crudo hacia abajo para que se cocine.
Cuando la torta está hecha,
partirla en porciones para que cada uno le ponga lo que más le guste. En casa le
hemos untado queso y encima hemos puesto
unas lonchas de salmón ahumado. Se puede poner eneldo por encima, que va muy bien con el salmón.
Y ya tenemos una cena deliciosa.
Si queréis ver en un vídeo cómo se hace la receta con mantequilla, aquí os dejo un vídeo elaborado por "El Cocinero Fiel"
Si queréis ver en un vídeo cómo se hace la receta con mantequilla, aquí os dejo un vídeo elaborado por "El Cocinero Fiel"
¡Qué aproveche! O como dicen por
aquí, En guete!
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