Me gusta que la peque entre en la cocina mientras estoy trajinando. Le gusta oler los alimentos, saber
si se pueden comer crudos o no, comer algo mientras lo estoy picando, y muchas
veces se pone su mandil y me echa una mano.
Hace ya tiempo que le gusta preparar de vez en cuando unas “tapas” para la cena. Al principio le echábamos una mano pelando o cortando, pero ahora ya sabe hacerlo ella con cuidado.
Gracias a un regalo promocional de los quesos Mini Babybel ha descubierto una nueva forma de preparar las tapas. Y está encantada.
El objeto en cuestión es un cortapastas de plástico, que
está disponible en 4 colores diferentes. Lo tienen de promoción en Alemania,
y viene con un “mini-folleto” donde te da ideas para hacer unos mini-sándwiches.
Aunque el regalo sirva a la empresa para hacer
más caja, en este caso creo que los consumidores también nos podemos beneficiar.
Es cierto que no deja de ser un cortapastas, pero el hecho de que sea de
plástico y de colores, llama especialmente la atención de los peques, y hace
que se despierte su curiosidad y su creatividad con respecto a la comida. Y,
además, pueden preparar sándwiches del tamaño de ese queso que tanto les gusta.
Y a lo mejor, hasta descubren que les
gusta algún alimento de esos que no quieren probar de ninguna manera.
Anoche, mientras yo preparaba una ensalada, y el papi unas
tortillas, la peque hizo unas tapas de rechupete. Y hoy se ha vuelto a animar
mientras yo preparaba unas espirales con salmón y salsa de eneldo.
Os dejo unas fotos que ella misma ha hecho de sus “tapitas”.
Como veis con pan de molde, tomates cherry y diferentes tipos de queso se
pueden hacer cosas muy saludables y llamativas.
¿Os animáis a cocinar con vuestros peques?